El pasado 29 de noviembre, el exsecretario del Trabajo y abogado laborista, Abelardo Cuéllar Delgado, recibió el fallo final del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Puebla, reconociendo que todas las acusaciones interpuestas en su contra por el gobierno del ahora difunto Luis Miguel Barbosa Huerta, eran infundadas.
Por más de dos años, la libertad y derechos políticos de Cuéllar Delgado fueron coartados por el asedio penal iniciado por la Secretaría de la Función Pública del Poder Ejecutivo de Puebla, acusándolo de presuntas irregularidades administrativas, luego de que un conjunto de extrabajadores públicos despedidos por el también difunto ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, triunfaran en un proceso encabezado por Cuéllar previo a ser funcionario, y que obligaba al estado a pagar una compensación económica que se presume fue el motivo de que Barbosa se enemistase con el abogado y decidiera destituirlo de la Secretaría del Trabajo y orquestara el acto de represión.
La sentencia del Tribunal Administrativo, notificada dentro del expediente 42/2021–PARA-1-3, reconoce la inocencia de Cuéllar, señalando no sólo que no existían elementos suficientes para respaldar la acusación y la dependencia no pudo acreditar de manera objetiva y contundente las imputaciones en su contra, sino que además, durante su gestión cumplieron, se los procedimientos establecidos por la normativa vigente.
Este fallo pone punto final a esta persecución política contra la cual se organizaron movilizaciones, mítines y pronunciamientos de numerosas organizaciones sociales que respaldaron a Cuéllar, quien además de ser conocido por trabajo como abogado a favor de trabajadores, también es un conocido militante de Morena, coordinador de colectividades productoras y un activista a favor de causas como la desprivatización del agua