Con globos, muñequitos, veladoras y sus retratos la escuela donde estudiaban las gemelas Meredith y Medilyn les rindió homenaje en su graduación.
Una imagen dolorosa. En la graduación de una escuela en Hermosillo hay dos sillas vacías con globos, unos muñequitos de Stitch y globos. Sobre los asientos están las fotografías de las gemelas Meredith y Medilyn con toga y birrete, junto a los retratis hay veladoras.
Así fue el homenaje en la graduación de las niñas que junto con su hermana y su mamá fueron víctimas de feminicidio de feminicidio en Sonora. En la ceremonia, los colores vibrantes que suelen estar presentes en las graduaciones fueron reemplazados por negro y dorado. Dejando un mensaje claro: la generación de Meridith y Medilyn está de luto, México vive en un luto que pareciera no tener fin y como lo enfatizó el colectivo Buscadoras por la Paz lo espantoso no se debe normalizar.
Mientras está en espera el comienzo del juicio de Jesús Antonio (que se espera sea en los próximos días) colectivas feministas están convocando a una manifestación el próximo domingo para exigir justicia y además clamar porque se hagan valer los mecanismos de protección para las mujeres en varios municipios de Sonora.