La nueva titular de la Comisión de Derechos Humanos de Puebla, Isela Sánchez Soya, se pronunció en contra de las recientes declaraciones del gobernador electo Alejandro Armenta Mier sobre la aplicación de la castración química a agresores sexuales, al considerarla una violación a los derechos humanos.
A través de su cuenta en X, Sánchez Soya se manifestó en contra de la iniciativa que el nuevo mandatario buscará presentar al Congreso de Puebla una vez que tome posesión del cargo el próximo 14 de diciembre.
La presidenta de este organismo considera que la implementación de esta medida es un trato cruel, inhumano y degradante para los derechos humanos.
Si bien expresó su indignación y solidaridad con las víctimas de estos delitos, dijo no coincidir con penas que atenten contra la integridad personal, física y mental de los victimarios.
Dicho esto, Isela Sánchez Soya indicó que el organismo que ella preside buscará tender puentes que permitan un trabajo en conjunto con el gobierno estatal para garantizar el acceso a la justicia de las víctimas, con pleno respeto a los derechos humanos de todas las personas.
Esto ocurre después de que, en conferencia de prensa, el gobernador electo Alejandro Armenta, miembro de Morena, propusiera este método como sanción para agresores sexuales, con el objetivo de reducir el índice de incidencias en este delito, aunque reconoció que esta propuesta podría generar controversia.
«No se trata de utilizar una guadaña, sino de aplicar una inyección para disminuir la libido sexual», afirmó.
Asimismo, recordó que, cuando fue senador, ya había presentado una iniciativa parecida, la cual en su momento fue cuestionada por organizaciones de derechos humanos.
Cabe recordar que antes de ser designada ombudsperson, Sánchez Soya fue mencionada en columnas periodísticas como favorita del gobernador electo para el cargo, algo que ambos han negado.