El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, declaró este martes la Ley Marcial, argumentando la necesidad de proteger el “orden democrático constitucional” frente a supuestas actividades “antiestatales” del principal bloque opositor, el Partido Democrático (PD), al que calificó de “fuerzas pro-norcoreanas”.
El anuncio llega en medio de una intensa crisis política, con un Parlamento controlado por la oposición y enfrentamientos sobre presupuestos y destituciones de altos funcionarios. Sin embargo, tras protestas de ciudadanos, horas después el presidente retiró la medida.
El decreto, emitido tras semanas de tensiones, otorgó temporalmente a las autoridades militares amplios poderes sobre el gobierno y suspendió libertades públicas. Sin embargo, la medida provocó rechazo inmediato tanto de la oposición como de figuras dentro del propio partido gobernante, el Partido del Poder Popular (PPP). Han Dong-hoon, líder del PPP, calificó la decisión de “incorrecta” y aseguró que trabajaría junto a la ciudadanía para detenerla.
La Ley Marcial fue una respuesta directa a las recientes acciones del Parlamento, liderado por el PD, que aprobó sin el apoyo del oficialismo los presupuestos de 2025 con recortes significativos y mociones para destituir a altos funcionarios del gobierno. El líder opositor, Lee Jae-myung, calificó la decisión de Yoon como “ilegal e inconstitucional”.
En las calles, centenares de ciudadanos se congregaron frente a la Asamblea Nacional en Seúl para protestar. Los alrededores del Parlamento se llenaron de tensión, con enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. Aunque el Parlamento intentó sesionar para bloquear la medida, los accesos fueron restringidos inicialmente por efectivos militares, intensificando la crisis.
Horas después del decreto, y en medio de una creciente presión interna e internacional, Yoon apareció en una conferencia televisada para anunciar que las tropas regresarían a sus cuarteles y que la Ley Marcial sería revocada en cuanto el gabinete formalizara la decisión. Esta rápida reversión sorprendió a legisladores y analistas, quienes cuestionaron la motivación detrás del decreto inicial y su repentina anulación.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa convocó a una reunión de emergencia con altos mandos militares para evaluar los pasos a seguir, lo que subraya la gravedad de la situación.
El enfrentamiento entre Yoon y el Parlamento evidencia una crisis institucional en Corea del Sur. Desde su estrecha victoria electoral en 2022, el presidente ha enfrentado dificultades para avanzar con su agenda política, agravadas por una oposición fortalecida, escándalos de corrupción y una caída en su popularidad.
La declaración y revocación de la Ley Marcial ha intensificado las críticas hacia su administración, con algunos sectores opositores exigiendo su renuncia o incluso un juicio político.
