El pasado 15 de octubre, la Oficina de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), denunció que el régimen de Netanhayu continúa sus ataques y los asesinatos contra la población palestina, esto a pesar que actualmente hay un acuerdo de paz vigente.
La ONU denuncia que el ejército israelí «sigue matando civiles» en las zonas en las que se suponen que ya no tendrían que estar, asesinando a tiros a más de 15 palestinas y palestinos en solamente cinco días.
«Atacar a civiles que no participan directamente en las hostilidades constituye un crimen de guerra, independientemente del lugar del incidente y su proximidad a la línea de despliegue acordada», fue lo que denunció la ONU mediante su comunicado.
Añadiendo que «es imperativo garantizar que el alto el fuego se mantenga y avance hacia la recuperación y la plena realización del derecho de los palestinos a la autodeterminación».
Las Naciones Unidas resaltan que la ayuda humanitaria ha comenzado a entrar, así como las y los voluntarios, pero exigen al régimen israelí que permita el ingreso sin tantas restricciones, ya que se cuenta con más ayuda la que no puede ingresar por toda la burocracia.
Durante el supuesto acuerdo de paz que se encuentra vigente en Palestina, no solo han sido asesinadas y asesinados civiles, el Hospital Infantil Al-Rantisi fue destruido, y cientos de infancias pueden morir por la falta de atención, debido a que la gran mayoría de los centros de salud fueron arrasados por las tropas israelíes.
Finalmente, el fin de semana pasado, el equipo negociador de Hamás había denunciado que el régimen de Netanhayu busca romper el acuerdo de paz bajo cualquier pretexto y así continuar el genocidio contra las y los palestinos mientras se encuentran en sus tierras, lo que ha sido respaldado por diversas y diversos expertos en derecho internacional e incluso, hay quienes dicen que ese era el objetivo desde el principio.
ONU denuncia ataques del régimen israelí en medio del acuerdo de paz
