Por segunda ocasión en esta semana, el presidente fascista de Estados Unidos (EUA), Donald John Trump, se siente intimidado por Brasil, la primera fue por los BRICS, ahora les amenaza con más aranceles, mientras que el presidente del país sudamericano, Luis Ignacio Lula Da Silva, le contestó de manera contundente que su nación no necesita «ningún tipo de tutela».
El día de ayer, Trump amenazó con imponer cincuenta por ciento de aranceles a todos los productos brasileños que entraran a su país, estos entrarían en vigencia a partir del próximo primero de agosto, y serían extra del diez por ciento de los «aranceles recíprocos» que ya había anunciado contra Brasil.
La justificación del fascista para estos nuevos aranceles es, según EUA, que Brasil «no ha sido bueno» con ellos y que ha sido «larga, injusta y perjudicial para Estados Unidos».
Pero más allá de ello, la verdadera razón por la que Estados Unidos busca presionar tanto a Brasil es por el juicio que se está llevando de contra del expresidente de ultraderecha de dicha nación, Jair Bolsonaro y parte sus colaboradores más cercanos, quienes enfrentan un proceso legal por el presunto golpe de estado que habrían orquestado con el actual presidente brasileño.
El ultraderechista de Bolsonaro fue un servil aliado de Trump durante su primer periodo, compartiendo su misma ideología machista, en contra del progresismo, de las vacunas, un megacionista de la COVID-19, conspiranoico y dio muchas concesiones al sector privado.
«Conocí y traté con el expresidente Jair Bolsonaro, y le tenía un gran respeto, al igual que la mayoría de los demás líderes de otros países. La forma en que Brasil ha tratado al expresidente Bolsonaro, un líder muy respetado en todo el mundo durante su mandato, incluso por Estados Unidos, es una vergüenza internacional. Este juicio no debería celebrarse. ¡Es una caza de brujas que debe terminar DE INMEDIATO!», Señaló Trump.
A lo que Lula Da Silva, contestó mediante su cuenta de Twitter, «Brasil es una nación soberana con instituciones independientes y no aceptará ningún tipo de tutela».
En el tema de la amenaza de los nuevos aranceles, señaló que «la afirmación sobre un déficit comercial de Estados Unidos en su relación comercial con Brasil es inexacta. Las estadísticas del propio gobierno estadounidense muestran un superávit de 410 mil millones de dólares en el comercio de bienes y servicios con Brasil durante los últimos 15 años».
Puntualizando que «cualquier aumento arancelario unilateral se abordará de conformidad con la Ley de Reciprocidad Económica de Brasil». Por lo que dicha nación, igualmente podría imponer los mismos aranceles que busque instaurar EUA.
Del lado judicial, Lula señaló que es independiente el Poder Judicial de su país y que «los procesos judiciales contra los responsables de la planificación del golpe de Estado son competencia exclusiva del Poder Judicial brasileño y, por lo tanto, no están sujetos a ninguna interferencia ni amenaza que pueda comprometer la independencia de las instituciones nacionales».
Terminando su mensaje con el recordatorio de que «la soberanía, el respeto y la defensa inquebrantable de los intereses del pueblo brasileño son los valores que guían nuestra relación con el mundo».
Finalmente, la amenaza de estos nuevos aranceles dejan ver que don con el objetivo de intimidar y manipular, ya que Trump señaló que los mismos podrían aumentar o disminuir, según sea la negociación a la que llegue Lula.
EUA teme a Brasil, Trump va por más aranceles; somos independientes, Lula
