El día de ayer, decenas de miles de brasileñas y brasileños salieron a las calles de sus principales ciudades para manifestarse en contra de la ultraderecha, misma que busca obtener un perdón para el expresidente jair Bolsonaro, quien purga una condena de 27 años de prisión por intento de Golpe de Estado y otros delitos graves.
Solamente en las calles de Sao Paulo se movilizaron más de 43 mil personas, mientras que en más de doce ciudades la medida fue replicada. Considerada como la mayor manifestación de la izquierda y el progresismo desde 2022.
Bajo las consignas de «dictadura nunca más», «congreso nunca más» y «sin amnistía», las y los manifestantes dejaron claro que no quieren que se le otorgue ningún tipo de perdón al exmandatario de ultraderecha.
Por su parte, el presidente de Brasil, Luis Ignacio Lula Da Silva, celebró las manifestaciones, señalando que está «del lado del pueblo» y enfatizó que eso «demuestra que la población no quiere ni impunidad ni amnistía».
«Estamos aquí para protestar contra este Congreso, que está compuesto por criminales, asesinos, corruptos, todos vestidos de políticos, quienes están articulando una ley que los autoprotege», declaró una de las organizadoras.
Las movilizaciones se dan después de darse a conocer que las y los diputados de ultraderecha buscan implementar una serie de reformas, por las que indiquen que solamente mediante voto secreto, las y los legisladores decidirán si la justicia puede investigar a uno de ellos.
Dentro del proyecto, la ultraderecha agrega una serie de indultos dirigido al presidente, a sus aliados y a cientos de manifestantes, acusados de intento de Golpe de Estado y otros delitos, medidas por las que buscan que se les exoneren y queden en libertad.
Finalmente, la medida ha sido sumamente criticada tanto por el presidente progresista Lula Da Silva, como el pueblo brasileño, ya que se acusa que las y los legisladores de ultraderecha buscan blindarse ante los presuntos crímenes que cometan, así como el querer liberar a los golpistas.
«Dictadura nunca más»; claman miles de personas ante posible perdón a Bolsonaro
