Esta madrugada, fue asesinado Salvador Bastida García afuera de su casa, presidente municipal de Tacámbaro, Michoacán, junto con su guardaespaldas, quienes se encontraban en su camioneta Ford tipo Pickup blanca, misma que fue baleada en el lugar por civiles que portaban armas de fuego largas.
Su guardaespaldas, identificado como Pastor Cortés Álvarez murió en la calle Fuerte de Loreto, mientras que el alcalde fue trasladado al hospital, dónde perdió la vida unos minutos después.
Las redes del ayuntamiento de Tacámbaro confirmaron el doble asesinato, dónde también lamentaron lo sucedido y señalaron que: «nos deja en un estado de tristeza y reflexión».
Añadiendo: «queremos reafirmar nuestro compromiso con la paz y la seguridad de todos los tacambarenses. Hemos solicitado el apoyo de las instituciones correspondientes para esclarecer este doloroso acontecimiento y asegurar que se haga justicia».
Remarcando que: «Tacámbaro ha sido un municipio tranquilo, y juntos, con unidad y fortaleza, continuaremos esforzándonos para que así siga siendo. Hacemos un llamado a todos a mantener la calma y a unirse en un espíritu de solidaridad en estos momentos difíciles».
El ex alcalde y parte de sus colaboradores eran investigados por parte de la Fiscalía General de la República Mexicana (FGR), esto por presuntamente organizar y mantener reuniones con integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En 2024 la FGR hizo pública la información de que se les investigaba a Salvador Bastida y a su entonces jefe de la policía local por sus nexos con el crimen organizado.
Inclusive, su primer tesorero, Raudel Campos Murillo renunció en el mes de noviembre del año pasado, esto después de haber sido acusado de pertenecer a una red de trata de personas.
También Melina Pérez Vélez, directora de Turismo del municipio se vio obligada a dejar su cargo, esto tras atravesar diversas polémicas, desde haber estado alcoholizada y trabajar, hasta haberse burlado del accidente dónde un adolescente de 16 años perdió la vida tras caerse de una tirolesa del parque ecológico «La Laguna».
Tras el ataque, algunas escuelas de la zona fueron cerradas junto con edificios gubernamentales, esto por el temor de que se registraran nuevos ataques armados en la región.
Finalmente la Fiscalía General del Estado de Michoacán señala que asumirán la investigación del caso, mientras que el gobierno del Estado enfatizó en que no habrá impunidad y se llegará a la justicia para las víctimas.
