El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, acusó a la organización Antorcha Campesina de estar detrás de la protesta y toma de las instalaciones de Ciudad Universitaria (CU) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). En respuesta, exigió a la agrupación que se abstenga de intervenir y pidió a la Fiscalía General del Estado (FGE) que actúe contra quienes vulneren la autonomía universitaria.
En su rueda de prensa habitual, realizada en Casa Aguayo, y a dos semanas de que iniciara el movimiento estudiantil en la Facultad de Medicina, el mandatario afirmó que su gobierno ha sido respetuoso de la autonomía de la BUAP.
“No van a sorprender al gobierno, la universidad no se toca por nadie”, declaró. Señaló que cuenta con información sobre la presunta participación de Antorcha Campesina en la toma de instalaciones y advirtió que no permitirá que esta situación continúe en perjuicio de la institución.
“He sido respetuoso de la autonomía universitaria, pero ninguna organización política puede afectar el derecho a la educación”, enfatizó.
Armenta subrayó que la educación es un derecho humano protegido por la ley y que quienes alteren la vida universitaria deberán responder ante la justicia. Informó que el secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, convocó a representantes de la organización para entablar un diálogo.
No obstante, exigió que los manifestantes se retiren del plantón en CU, ya que su permanencia pone en riesgo el registro de 150 mil estudiantes para el próximo ciclo escolar, pues el cierre de las instalaciones ha impedido la publicación de la convocatoria.
Además, hizo un llamado a la clase política y advirtió que cualquier funcionario público o integrante de un partido político que intervenga en el conflicto será sancionado conforme a la ley.
## Afectación a más de 200 mil estudiantes
El gobernador pidió a la FGE actuar contra quienes han interferido en la vida universitaria, pues han impedido que más de 200 mil estudiantes ejerzan su derecho a la educación. Aseguró que, durante su gestión, mantendrá una postura de respeto hacia todas las universidades, tanto públicas como privadas.
Reiteró que no permitirá que ninguna organización o actor político desestabilice las instituciones educativas y afirmó que las autoridades ya tienen identificadas a las personas involucradas.
“No aceptaremos chantajes. Diálogo sí, acuerdos sí, chantajes no. La universidad se tiene que abrir, CU debe ser entregada a sus autoridades y nosotros apoyaremos cualquier acción que garantice el respeto a la ley”, concluyó.
