Qué simpática y peligrosa es la gente de ideología de derecha y «libertaria»; hoy aplauden que personas con poder pronuncien discursos de odio y tome acciones de represiones contra la comunidad migrante, población LGBTTTIQ+, jubiladxs, negrxs, personas no católicas, en contra del colonialismo, la comunidad estudiantil y demás sectores, pero lo que todas estas mentes no tan brillante no entienden, o se niegan a ver, es que mañana vendrán por ellos, y no podrán meter ni las manos.
Hay quienes creen que cumplen con los cánones de la derecha: ser personas blancas o «no tan morenas», heterosexuales, ejerciendo el modelo de familia tradicional y siendo personas católicas, pero la verdad, es que la derecha los desprecia enormemente y, si pudiera, les esclavizaría y reduciría sus derechos a lo mínimo.
Pero estos no son solo dichos, en México tenemos a un capitalista y derechista con Salinas Pliego, quien sobreexplota a sus trabajadoras y a sus clientes, simple y llanamente para perpetuar su riqueza, a costa de las y los menos favorecidos.
En Argentina hay un Javier Milei quien, en sus discursos, prometió que iría contra la «casta» —que como muchxs habíamos advertido, era falso—, pero ahora, en su gobierno, ha demostrado que sus enemigos es el sector obrero, las personas de la tercera edad, mujeres, población LGBTTTIQ+, el progresismo y hasta ha mostrado estar peleado con los mismísimos derechos humanos.
En Italia, Georgia Meloni ha demostrado que está en contra de la migración y no le importa si seres humanos pierden la vida, además, en contra del progresismo y a favor del regreso de lo que consideran las viejas buenas costumbres, en este caso, el fascismo.
Ahora trump, con su nuevo gobierno en Estados Unidos, está tomando acciones sumamente peligrosas contra todes; quienes no entren en su diminuta concepción del mundo, contra la comunidad migrante, la población LGBTTTIQ+, ahora contra la población Trans para buscarla, oprimir, invisibilizar y finalmente, desparecer, además, el apoyo monetario en favor de las grandes fortunas, sobre las mayorías, pero esto solo hay que entenderlo como el inicio del corte faccioso y fascista de los ultras, contra los derechos humanos.
Y claro, ahora hay quienes envalentonados, en redes sociales comentan «justo lo que vote» o «disfrutando lo votado», pero, por lo visto, no entienden que no entienden, hoy ataca la derecha de manera sistemática a nivel internacional al progresismo, mujeres, migrantes, población LGBTTTIQ+ y demás; y las personas que no pertenecen a estos sectores y no congenian con estas ideologías lo aplauden, pero cuando terminen de agredir a estos sectores, irán contra aquellos que no pertenecen al 1% y ahí es cuándo buscarán ayuda y se darán cuenta que fue muy tardes.
Pero, me gustaría dejar una última reflexión, ¿Es normal decir estar en favor de la libertad, pero perseguirla?, pensaría que la respuesta es más que obvia, pero parece para muchas personas que no lo es, y apoyan esa extraña «libertad» que se ha usado para la derecha en su justificación de persecución de lo que odian.
Finalmente, me gustaría recordar una frase de Emiliano Zapata que dice; «el que quiera ser aguila que vuele, el que quiera ser gusano que se arrastre, pero que no grite cuando lo pisen».
Ahora van contra el progresismo y lo que odias, pero mañana, vendrán por tí
