El nazismo no quedó en 1945, permanece y manifiesta en diversas formas de crueldad y genocidio.
“Un burro puede fingir ser un caballo, pero tarde o temprano rebuzna. Al final cada quien demuestra quién es, las apariencias no son sostenibles.” Dicho popular
Por más que se intente borrar de la historia acciones lamentables de crímenes contra la humanidad, violaciones a los derechos humanos, etcétera, la memoria histórica se recupera con el tiempo y señala a los culpables.
Durante el nazismo de Hitler, al momento de su domino político en el poder en Alemania de 1932 a 1945, la persecución, encaminamiento de disidentes comunistas, anarquistas u opositores políticos, periodistas, literatos, científicos al régimen nazi, como también a gitanos, judíos y de otros grupos étnicos, en campos de concentración, hasta que en los mismos se ejerció la maquinaria de exterminio o genocidio, estimado que se establecieron 1 000 campos de exterminio y de concentración en los países ocupados por Alemania, sin incluir a los pequeños campos creados ad hoc para la población local. La mayor parte de estos campos fueron destruidos.
De los seis millones de judíos exterminados, agreguemos 16,600000 pertencientes entre prisioneros de guerra soviéticos, polacos étnicos, romaníes clasificados peyorativamente como “gitanos”, servios, croatas, lituanos y de otras entidades europeas, discapacitados, disidentes y opositores, Testigos de Jehová, personas negras en Alemania, principalmente.
Sí, los Juicios de Nuremberg cumplieron un papel crucial, aunque no perfecto, en el establecimiento de estándares internacionales para juzgar crímenes de guerra y contra la humanidad, y sentaron las bases para el desarrollo del derecho penal internacional. Si bien no erradicaron la guerra ni el genocidio, sí lograron un reconocimiento oficial del Holocausto y sentaron precedentes importantes para futuras cortes penales internacionales.
Desde el 7 de octubre de 2023 cientos de milicianos de Hamás invadieran Israel y asesinaran a cerca de 1.200 personas, llevándose a unos 250 rehenes.
La operación militar israelí que se inició ese mismo día y que se ha convertido en una guerra total ha devastado la Franja y matado a más de 55 mil palestinos, sobre todo niños y mujeres.
El 90% de la población de Gaza se ha visto desplazada y la mayor parte malvive en condiciones infrahumanas, entre montañas de basura y aguas fecales debido en gran parte al bloqueo que Israel impone sobre la entrada de ayuda humanitaria a la Franja, según denuncia la ONU. Ante la masacre que padece el pueblo gazati por parte del sionismo israelí, al momento que controla los asentamientos de almacenes de alimentos, medicinas y otros materiales urgentes para la supervivencia de los palestinos, mueren de desnutrición niños y heridos por falta de insumos médicos, considerando que el ejército israelí ha bombardeado 27 hospitales y 12 centros médicos en Gaza, algunos de ellos incluso en seis ocasiones, dijo hoy ante el Consejo de Seguridad el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, que según el ministerio palestino de Salud se han cobrado la vida de 1.050 profesionales del sector, siendo todos ellos -recalcó Türk- «civiles que prestan una función crítica en tiempos de guerra».
La esperanza de los habitantes de Gaza por lograr un poco de alimentos que controla el mando militar de Israel, por ese hecho, reciben disparos provocando la muerte de mas de 500 personas, justificándose Israel que entre ellos estaban miembros de Hamas, totalmente falso.
El país se declaró Estado independiente el 14 de mayo de 1948. El acontecimiento formaba parte de una resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de noviembre de 1947, en un plan para dividir la región de Palestina (antigua provincia otomana de Palestina) entre Israel y un Estado que aglutinara a la población local de habla árabe. Sin embargo, por intereses económicos y políticos de Estados Unidos e Inglaterra. Esta decisión supuso la expulsión de cientos de miles de palestinos de sus tierras durante el inicio de la guerra árabe-israelí de 1948, un terrible suceso conocido como la Nakba que sin duda contribuye a contextualizar la situación bélica actual del territorio.
Entre los Estados Unidos e Israel, los intereses económicos, financieros, políticos, militares y geopolíticos, son íntimos como comprometidos, frente a la guerra económica, política y militar contra quienes consideran sus enemigos, desde el inicio de Israel como país recurriendo a la fuerza militar apoyada por el imperialismo norteamericano contra naciones y pueblos árabes, musulmanes y turcomanos, para impedirles consoliden su soberanía e independencia económica y así no tengan relaciones firmes con Rusia, China y otros países; a su vez, mediante sabotaje de la CIA y el Mossad, que es la agencia de inteligencia interior de Israel, en líneas generales es equivalente a la CIA o el M16 del Reino Unido
El Mossad, cuyo nombre oficial es Instituto de Inteligencia y Operaciones Especiales, fue constituido en 1949, apenas meses después de la creación del propio Estado de Israel por David Ben-Gurión, el primer gobernante del país.
La misión del organismo es «reunir inteligencia, frustrar amenazas y garantizar la seguridad del Estado de Israel y el pueblo judío».
El objetivo central del sionismo, es el de impedir la consolidación de Palestina como nación, impedir o restar que naciones y pueblos musulmanes y de Asia Central, que está conformada por cinco naciones independientes: Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán. Estas naciones comparten una historia y cultura común, y a menudo se les agrupa como una región debido a su ubicación geográfica y vínculos históricos, especialmente después de la disolución de la Unión Soviética.
Para el matrimonio USA-Isarel, el control y domino geográfico de la región es primordial, porque se controla el petróleo, gas y otras potenciales económicas, imponiendo su política a Arabia Saudita, Jordania Catar, Quait, que forman parte del Medio Oriente. Basta recordar que Irak tambien los E.U. enjercieron su dominio desde 1950 con Saddam Husein. Estados Unidos apoyó a Irak bajo mando de Saddam Husein en la guerra contra Irán como política de contención contra el nuevo régimen revolucionario de Irán, a pesar de las graves violaciones de derechos humanos cometidos por Husein, en particular contra los kurdos en la región del norte del país, hasta que Saddam intentó separarse del yugo, bajo la mentira que Irak tenía armas de destrucción masiva, es destruido su ejercito y eliminación de Saddam.
El turno de las falacias por parte de USA e Israel, es sembrar que Irán “posee proyectiles atómicos”, pretexto de que se le exige a Irán desde la ONU, a que deje de desarrollar misiles atómicos y se apegue a investigación, comprobándose que no lo hace. No obstante, la política de Irán contra Israel del genocidio del pueblo palestino y otros países como Paquistán, sumando el clamor mundial contra tal masacre, Netanyahu mantiene su postura de afirmar que es para proteger a su nación.
Irán es el ejemplo y pretexto del bin0omio norteamericano e israelí, de eliminar a un enemigo político, económico y militar, como lo hizo contra Irak, sin considerar que es otra historia como también una nación que tiene una población con fuertes lazos de identidad nacional, cultura y consciente de que ellos son los enemigos de su pueblo y del mundo. Quien inició los ataques y acciones bélicas es Netanyaho, quien apostó que en unos cuantos días aniquilaba el poder bélico de Irán, sin embargo, la respuesta que recibe Israel en su infraestructura militar como edificios clave, incluyendo el Mossad, ya tiene efectos catastróficos para Israel, al grado de que Doanld Trump amenaza con destruir centrales nucleares de Irán, quien es apoyado por Rusia, China, Turquía, Paquistán y otras naciones.
Trump y sus títeres de la OTAN, mantienen en vilo a la Unión Europea ante el fracaso de apoyar al títere de Zelensky (que primero lo fue de Biden) y sus fuerzas nazis contra Rusia quien libera la región del Dombas, masacrada por ellos, que no encuentran cómo tomar una postura firme en el conflicto Israel-Irán.
Ya sea el sionista Netanyahu o Trump, el racismo, los conduce a ser un acercamiento a Hitler, o seguir sus pasos genocidas, porque Trump y su política de expulsar a latinos mediante acciones policíacas como lo fue las SS y Gestapo de la Alemania nazi, al causarlos de ser parte de narcos y criminales, conduce a su país a la movilización social contra tal política discriminatoria de ultraderecha y crisis económica, porque los migrantes hacen mover la producción y desarrollo económico de dicha nación de migrantes.
Por último, tanto Trump como Netanyaho, son acusados de delitos y criminales, que usando el poder que les confiere sus gobiernos, de momento son impunes. AMBOS PODERES CRIMINALES EN LA HISTORIA NO PUEDEN BORRAR SUS ACCIONES.
