Es el Estado

En todo crimen, ejecución o desaparición forzada, es el Estado o intereses internacionales, quienes son los principales actores.

“En política la sensatez consiste en no responder a las preguntas. La habilidad, en no dejar
que las hagan”. André Suarès, poeta y crítico francés.

¡2 de Octubre no se olvida!

No es nada más una proclama de exigir justicia, es manifiesto del proceso histórico de
represión y crímenes de Estado contra la población por décadas. Algunos comentócratas y
de la derecha cimarrona política y empresarial intentaron evidenciar que la presidenta
Claudia Sheinbaum, se sumara a la memoria herida abierta, lo cierto es que los autores de la
masacre del 2 de Octubre están encumbrados desde el Estado con Gustavo Díaz Ordáz y Luis
Echeverría.

Décadas donde el Estado recurrió a la represión, encarcelamiento y ejecución de
ciudadanos, recordemos que durante el gobierno de Manuel Ávila Camacho, bajo pretexto
de que el mundo se encontraba en la Guerra Mundial, y de que el gobierno norteamericano
sostuvo que Japón podría invadir su país y parte de México, a su vez, que Alemania nazi
infiltraría terroristas y espías en México, el presidente instruyó modificación al Artículo 145
bis del Código Penal Federal , en septiembre de 1941, de “disolución social”, para “combatir
el terrorismo extranjero”, que fue revisado y aprobado por la SCJN de aquél entonces, en
En los hechos, sirvió para reprimir movimientos obreros, campesinos, magisterial y
ferrocarrileros que se manifestaban contra políticas retrógradas laborales y salariales
impuestas por Ávila Camacho, en apoyo de la burguesía, también, minar los logros laborales
y sociales del presidente Lázaro Cárdenas.

Los movimientos sociales se incrementan como en 1951 4000 mineros carboníferos, 100
mujeres y 30 niños realizaron una caravana de protesta desde Nueva Rosita, Coahuila, a la
capital del país que se convirtió en el movimiento social más importante de la época. Los
mineros marcharon para exigir la solución a un conflicto político-laboral: la empresa
American Smelting and Refining Company (Asarco) y las autoridades laborales se habían
negado a reconocer a los representantes sindicales de la Sección 14 del Sindicato Industrial
de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana. Movimiento
que fue acusado de comunista y contra la “democracia”. la represión y presión
gubernamental, además de contar con aparatos de represión, para garantizar sometimiento, una vez más, la SCJN avaló al gobierno. ¿Cuáles fueron las consecuencias de la caravana del
Hambre? Clausuraron la cooperativa de consumo que los abastecía de alimentos;
congelaron los fondos sindicales; cerraron la clínica obrera; se censuró la correspondencia
de los mineros y se suspendió el servicio de agua y alumbrado de las casas.

Islas Marías, Lecumberri (Palacio Negro), cárcel de Belén, el Estado las usó como “refugio”
de la disidencia terrorista”, donde las narraciones de los presos denotan plena injusticia.
Diego Rivera, Valentín Campa y Demetrio Vallejo, por su liderazgo en el movimiento
ferrocarrilero de 1959, acusados por el delito de disolución social, sin olvidar a José
Revueltas por comunista.

Rubén Jaramillo, otrora oficial del ejército zapatista fue uno de los pilares de la lucha agraria
y obrera en Morelos durante los gobiernos posrevolucionarios. Apoyó a Lázaro Cárdenas en
su candidatura a la presidencia, luego, ya con Ávila Camacho, lo traiciona y persigue, por lo
que continuó luchando en apoyo a campesinos al ser violados sus derechos, siendo en el
gobierno de Adolfo López Mateos, quien lo acusa de agitador, por lo que su secretario de
gobernación, Gustavo Díaz Ordaz, es quien gira órdenes de acabarlo.

El 23 de mayo de 1962 un destacamento militar apoyado por policías judiciales sacó de
su casa, en Tlaquiltenango, Morelos, al dirigente campesino Rubén Jaramillo, a su
esposa Epifania, que estaba encinta, y a sus hijos Enrique, Filemón y Ricardo. Dos horas
después la familia fue acribillada en las cercanías de las ruinas de Xochicalco, consumándose
así uno de los más atroces crímenes políticos del siglo XX mexicano. ¿Quién fue? El Estado.
Desde 1958, estudiantes residentes en hospitales junto con médicos, inician por demandar
mejores condiciones de trabajo como otros servicios, hasta que en 1964, al no cumplirles sus
demandas realizan paro. El titular de la SSA, el doctor Rafael Moreno Valle, les dice que
atenderán demandas, derivando en suspensión del paro, sin embargo, Díaz Ordaz , en 1965
arremete contra el movimiento con represión y despidos.

Caciquismo, burquesía agraria y gobiernos cómplices, despojaban tierras de grupos
originarios y campesinos, quienes protestaban contra la violación a sus derechos, la
represión y asesinato la respuesta. En Guerrero, Oaxaca y los estados del norte la constancia
de violación. Campesinos de la sierra de Chihuahua emprenden defender sus territorios,
mismo movimiento que el Estado y su aparto judicial los denunciaba de violación a las leyes
y agitación, la respuesta campesina es de mayor actividad y organización: una vez más el
artículo 145 en acción.

Si la Constitución les es secuestrada, consideran que el único camino es la vía armada,
requiriendo adiestramiento que inicia en 1964, determinando efectuar el asalto armado a la guarnición militar de Ciudad Madera. El Asalto al Cuartel de Madera es la primera acción de
envergadura de la guerrilla contemporánea en México. Fue realizada por la organización
insurgente Grupo Popular Guerrillero en la madrugada del 23 de septiembre de 1965;
participaron campesinos, estudiantes, maestros y líderes agrarios, que intentaron tomar el
cuartel del Ejército mexicano en Madera, Chihuahua. El asalto resultó fallido muriendo la
mayoría de los guerrilleros.

Genaro Vázquez, Lucio Cabañas y muchos más, son la respuesta de la represión e
injusticias, sus movimientos derivan de esas condiciones, hasta que el Estado los aniquila,
junto con ciudadanos y familiares en su entorno

«Los Peores genocidios lo han permitido políticos cobardes, que le piden al pueblo que se
rinda antes que luchar». Luis Gabriel Carrillo Navas

El 2 de octubre, deja marcado la masacre en Tlatelolco, los sobrevivientes son testigos y
exclaman con lágrimas coraje y denuncia sin respuesta.

El movimiento estudiantil de 1968 llevó a decenas de presos políticos a Lecumberri. En la
manifestación del 26 de julio de 1968 se consignó a las primeras 43 personas, varias de ellas
integrantes del Partido Comunista Mexicano, acusadas de lesiones, secuestro, robo,
pandillerismo, daño en propiedad ajena, daño a la nación y ataques a las vías generales de
comunicación. Muchos fueron acusados del delito de disolución social. Al interior de
Lecumberri los presos políticos vivieron diversas vejaciones, incluso heridas de gravedad, en
la que los presos comunes fueron usados para lastimarlos.

“El negacionismo es, en sentido estricto, el estadio supremo del genocidio.” Bernard-Henri Lévy filósofo francés 1948

Desde los sesenta a mediados de los ochenta, el Estado emprende una persecución de
exterminio contra movimientos sociales y guerrilleros, cientos de los militantes fueron
detenidos, la mayoría torturados y desaparecidos en lo que se conoce como Guerra Sucia, al
grado de que en la base militar en Acapulco, Guerrero, la base militar fue usada para los
“aviones de la muerte”, donde cargaban aviones para transportar cadáveres o vivos de los
“agitadores terroristas” y arrojarlos al mar.

La norma criminal continuó sistemáticamente en reprimir o ejecutar y desaparecer hasta el
sexenio de Enrique Peña Nieto. ¿quién fue? Es el Estado.

Fuentes:

Rojo Coronado. Jose. La inconstitucionalidad del artículo 145 del Código Penal Federal.
Costa-Amic, Editor. México. 1968

Caballero, J. (2010) “Amparos y abogángsters: la justicia en México entre 1940 y 1968”, en
Servín, E. (coord.), Del nacionalismo al neoliberalismo, 1940-1994, México, Fondo de Cultura
Económica y CIDE. 1999.

Pulido, D. “Los delitos de disolución social: primeras experiencias (1941-1944)”,
Antropología. Boletín oficial del Instituto Nacional de Antropología e Historia, México,
Instituto Nacional de Antropología e Historia, núm. 101. 2016

Daniel Librado Luna. A 70 años de la caravana minera de 1951. Instituto Nacional de Estudios
Históricos de las Revoluciones de México (inehrm) 2021

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