Como una violación al derecho internacional resulta la reciente decisión de que Israel prohíba las actividades de la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), una medida que, además, afecta la ayuda humanitaria.
Así lo aseguró la ONU este día tras que el Parlamento israelí aprobara una ley para impedirlo, toda vez que consideró que será perjudicial para la resolución del conflicto palestino-israelí.
El proyecto de ley, respaldado por 92 votos a favor y 10 en contra, busca detener completamente las operaciones de la UNRWA en Israel, lo que implicaría el cese de su trabajo en Jerusalén.
Mediante un comunicado, el responsable de la UNRWA, Philippe Lazzarini, dijo que esta acción contraviene la Carta de la ONU y las obligaciones internacionales de Israel, lo que podría agravar aún más la situación de los refugiados palestinos.
Además, señaló que estas iniciativas son parte de una campaña para desacreditar a la UNRWA y sólo intensifican el sufrimiento de los palestinos, especialmente en Gaza, donde ya enfrentan condiciones extremas.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, coincidió con Lazzarini al señalar que la implementación de estas leyes tendría «consecuencias devastadoras» para los refugiados palestinos, por lo que instó a Israel a actuar conforme a sus obligaciones internacionales.
Del mismo modo, el Comité Consultivo de UNRWA, compuesto por 29 Estados miembros, recordó que su misión es proporciona asistencia vital a los refugiados palestinos, por lo que su cierre tendría «consecuencias devastadoras» en una situación humanitaria.