Gustavo Petro, presidente de Colombia, suspendió las conversaciones de paz tras acusar al Ejército de Liberación Nacional (ELN) de cometer “crímenes de guerra” contra la comunidad del Catatumbo. Los enfrentamientos en la región dejaron decenas de muertos. Según cifras extraoficiales, el número de fallecidos supera las 34 personas, mientras que la Defensoría del Pueblo, a través de Iris Marín, reporta 30 víctimas mortales en una publicación en la red social X.
Marín también denunció una grave situación humanitaria: “Hay secuestros, niños sin acompañamiento, personas con discapacidades severas que no pueden huir, desplazamientos forzados y confinamientos”.
«Lo que ha cometido el ELN en el Catatumbo son crímenes de guerra. Se suspende el proceso de diálogo con este grupo. El ELN no tiene ninguna voluntad de paz», escribió Petro en su cuenta oficial en X.
Por su parte, Vera Grabe, jefa de la delegación del Gobierno, reafirmó la decisión del presidente en una rueda de prensa: “(…) hasta que el ELN definitivamente decida caminar hacia la paz (…) Este país no aguanta más estos vaivenes”.
Ambas partes tenían previsto reunirse la próxima semana para reactivar la mesa de diálogo, que el Gobierno de Petro retomó en noviembre de 2022 tras años de estar congelada por desacuerdos entre los involucrados.
Más de 30 muertos
La ruptura de las conversaciones de paz, que ya se encontraban en un estado crítico desde hace meses, se da tras el asesinato de decenas de personas en el Catatumbo, donde el ELN sostiene enfrentamientos con una disidencia de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Entre las víctimas se encuentran cinco firmantes del acuerdo de paz de 2016, un tratado que marcó el cese de fuego entre el gobierno colombiano y las FARC, tras décadas de conflicto armado.
Carlos Ruiz Massieu, representante de la Secretaría General de las Naciones Unidas, hizo un llamado urgente: “Es necesario proteger a la población civil y a las comunidades”. Asimismo, exhortó a los grupos armados a “cesar las acciones violentas (…) La verdadera voluntad de diálogo pasa por respetar la vida de quienes optaron por la paz”.
Colombia y el ELN
El Ejército de Liberación Nacional (ELN) es una organización guerrillera colombiana con presencia en Venezuela, considerada una fuerza binacional.
En sus inicios, el ELN fue influenciado por la Revolución Cubana y centró sus actividades en el secuestro, la extorsión y ataques a la infraestructura petrolera. Durante décadas evitó involucrarse en el narcotráfico, pero actualmente tiene una fuerte relación con el tráfico de drogas.
Hoy en día, el ELN cuenta con más de seis mil integrantes, incluidos miembros infiltrados en comunidades civiles. En Colombia, su objetivo principal sigue siendo enfrentarse al Estado mediante una revolución armada, además de mantener disputas con otros grupos armados.
