Al menos 32 delfines de una especie en peligro de Azov murieron luego del desastre ecológico ocurrido hace tres semanas en el estrecho de Kerch, que separa la península de Crimea de la región sureña de Krasnodar en Rusia.
Así lo dio a conocer este domingo el Centro de Rescate e Investigación de Delfines de Rusia en un comunicado, quien confirmó que las muertes estatían relacionadas con el derrame de aceite de combustible de dos petroleros afectados por tormentas.
El grupo ambientalista señaló que desde la emergencia han muerto 61 cetáceos, pero los otros 29 habrían muerto antes del derrame:
“Juzgando por la condición de los cuerpos, lo más probable es que la mayoría de estos cetáceos murieron en los primeros 10 días después del desastre. Y ahora el mar continúa arrojándolos a la costa”, escribió el centro.
Por su parte, el Ministerio de Emergencias de Rusia indicó que más de 96 mil toneladas de arena contaminada habían sido retirados por funcionarios y voluntarios a lo largo de la costa de los distritos de Anapa y Temryuk en la región de Krasnodar; y estimó que hasta 200 mil toneladas podrían haber sido contaminadas con mazut, un producto de petróleo pesado y de baja calidad.
Con anterioridad, el presidente ruso Vladimir Putin calificó el derrame de petróleo como un “desastre ecológico”, mientras que este sábado funcionarios designados por Rusia en Crimea ya habían declarado emergencia regional luego de que se detectara petróleo en las costas de Sebastopol.
Cabe destacar que el estrecho de Kerch es una ruta global de paso desde Azov hasta el mar Negro, y ha sido clave en el conflicto entre Rusia y Ucrania.