“El 12 de diciembre, en Nueva York celebró con fervor la festividad de la Virgen de Guadalupe, con misas y procesiones que unieron a las comunidades latinas. Destacó la peregrinación «Carrera Antorcha Guadalupana», que viajó desde México hasta la ciudad, simbolizando la fe y esperanza de los inmigrantes. La procesión culminó en la Catedral de San Patricio, donde miles de fieles participaron en una misa presidida por el cardenal Timothy Dolan”
Las celebraciones en honor a la Virgen de Guadalupe, en conmemoración de su aparición el 12 de diciembre de 1531 en México, se celebran en numerosos lugares donde haya devotos. Y esta no es la excepción para Estados Unidos, en donde en la ciudad de Nueva York, estas festividades tienen un carácter particular, extendiéndose a parroquias y barrios con comunidades católicas, quienes participan en misas, procesiones y eventos religiosos, reafirmando su devoción a la Virgen Morena.
Devotos católicos participaron este pasado jueves en una celebración en la Catedral de San Patricio para conmemorar a Virgen de Guadalupe. La ceremonia fue presidida por el cardenal de Nueva York, Timothy Dolan, y, como cada año, cientos de fieles se reunieron para celebrar el encuentro de la Virgen con Juan Diego en el Cerro de Tepeyac. “Viene un pedacito de casa y pueden visitar la imagen, rezar y traer sus intenciones a Dios”, dijo uno de los organizadores de la peregrinación.
A primera hora del jueves 12, comenzó el recorrido en las calles de Nueva York, distintos grupos y organizaciones religiosas como la tan conocida peregrinación anual Carrera Antorcha Guadalupana, que desde 2002 ha tratado de reunir a familias y comunidades a través de la frontera, bajo el patrocinio de la Virgen de Guadalupe. La cual tuvo casi dos meses de viaje desde la Ciudad de México, fue recibida con emoción por los mexicanos en el corazón de Manhattan.
El representare de la peregrinación, fue el encargado de portar la antorcha, acompañado por la cónsul de México en Nueva York, la cónsul de Asuntos Comunitarios, además de otros invitados especiales, partieron desde el Santuario de la Virgen de Guadalupe en la Iglesia de San Bernardo, en la calle 14, sube por la octava avenida y enfila hacia la Calle 50 hasta llegar a la Catedral de San Patricio.
Con la tradicional canción «La Guadalupana», la peregrinación avanzó por la quinta avenida. Mientras que la imagen de la Virgen era transportada en un remolque, desde el cual los fieles pudieron verla mientras avanza. Acompañados además de la antorcha encendidas, símbolo de «la luz de la fe y el espíritu de resiliencia entre los inmigrantes», declararon los organizadores. Dicho evento también estuvo acompañado por las “Mañanitas a la Virgen”, un acto que combina solemnidad y un ambiente festivo, destacado por la música de mariachi y danzas tradicionales mexicanas.
Al finalizar la procesión, se celebró una solemne ceremonia en la Catedral de San Patricio, presidida por el cardenal Timothy Dolan. Este acto religioso cerró con broche de oro las festividades en honor a la Virgen de Guadalupe, reuniendo a miles de fieles en un ambiente de recogimiento y devoción. “Traemos la imagen de la Virgen de Guadalupe para los que no pueden visitarla en México; es traer luz y un mensaje de fuerza, fe, esperanza y milagros», concluyeron los organizadores.
Estas celebraciones no solo conmemoran la aparición de la Virgen de Guadalupe, sino que también representa la esperanza de millones de inmigrantes en Estados Unidos. Según los participantes de este evento, señalan que la peregrinación representa una fuerte carga de significado religioso que se ha convertido en un símbolo de unidad y resistencia para la comunidad latina, reflejando su constante lucha por la justicia y el reconocimiento de sus derechos en el país.
