La Editorial Almadía se comprometió con un libro de poemas escritos por una Otaku y ahora tiene su presentación en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en su edición 2024.
El Poemario de Paola Llamas Dinero, ya ha dado una gira por varias regiones. Poemas para Otakus. Durante la Cindy Hatch rememoró la gira de presentaciones y su cierre en la Fil Guadalajara,
Además, durante la presentación, la escritora Selene Flores afirmó que conoció la obra de Paola Llamas gracias a una recopilación de trabajos titulada «Nueve poetas que le temen a los payasos», con un poema donde narra cómo su novio duerme y cómo teme verlo morir, «una poesía con sentimiento y buen humor, con la intención de juego, la sorna, la amabilidad y la ternura, es una persona que, más allá de apagarse, crece mucho más, dijo.
Pareciera que al llegar a los 30, los poetas cambian, afirmó, pero Paola conserva su frescura. «Recuerda que la poesía es espacio de juego, reinventando las reglas pero acotando de acuerdo a las circunstancias».
Del mismo modo,destaca que la obra es un libro fresco que tardará mucho en caducar.
Esa creatividad y empatía, también se puede verter hacia personajes de ficción, llegar a enamorarse de ellos y sufrir su muerte, como la de «Gojo Satoru» de Jujutsu Kaisen: «Con buen humor, habla al público exponiendo su vulnerabilidad en favor de la nuestra».
Asimismo, lCindy Hatch remarcó en la presentación que, aunque no es Otaku, el libro tiene otra parte para «cualquiera que se ha enamorado de alguien que no existe», pensar entre los imaginados y la realidad. Refirió la forma de abordar la autora los momentos en que la añoranza puede surgir por un episodio nuevo del manga o por el anime favorito.
Pero también invita a cuestionar el amor, la vida y la relación con los muertos en la realidad. «Es un acercamiento con una poesía accesible, de la mano del impulso a la literatura entre los jóvenes».
Así, Paola Llamas Dinero remarcó que el título es un pretexto para invitar a la poesía y hablar de lo que sentimos desde nuestra experiencia, como lo es la cultura Otaku.
Por medio de las referencias a animes y mangas, Paola crea una red entre la poesía y el anime: «Son cosas que me acompañaron en la formación de mi identidad, me enamoré de Trunks del futuro (Dragón Ball Z), puedo tener más de 30 años pero reconozco que mi formación identitaria viene de ahí», añadió.
«Este libro nació de la soledad de la pandemia, del aislamiento pero bombardeados de información y cosas negativas. Ahí, muchos encontramos refugio en el anime. Fue un tiempo en que el anime te abrazaba en la soledad. Cumplían el rol de la poesía, es un lugar en el que puedo ser yo».
«Tanto el anime como la poesía acompañan. El libro lo escribí en soledad y sirve para acompañar. Incluso hay personas que no conozco que me dicen que, con el libro, nos reconocemos como Otakus. El libro ha sido compañía para mucha gente que tal vez no vea en persona», afirmó recordando el dolor por la muerte o el triunfo de un personaje de manga, una empatía que trasciende al mundo.