La bailarina Elisa Carrillo no deja de trabajar en México, y con el montaje del Bolero de Béjart en el Auditorio Nacional cierra una serie de presentaciones a unos meses de asumir el cargo de directora de la Escuela John Cranko, en Stuttgart en Alemania.
“Con Bolero toco la cima. Es un momento fundamental en mi carrera y en mi vida. Con él termino una etapa importante en los escenarios”, dijo la bailarina Elisa Carrillo en entrevista para el medio Excélsior poco antes de la función en el Auditorio Nacional.
Tras una presentación extenuante y ante la prensa, Elisa habló de los resultados vistos tras la planeación y formación del montaje: “este proceso me ha enseñado cosas bellas y difíciles. Es un gran reto, porque es una música tan maravillosa que puedes dejar de pensar en los pasos. La energía es muy fuerte y exige máxima concentración”.
Además, añadió: “Con Bolero toco la cima. Es un momento fundamental en mi carrera y en mi vida. Con él termino una etapa importante en los escenarios”, afirmó la bailarina que en pocos meses asumirá el puesto de directora de la Escuela John Cranko, en Stuttgart en Alemania.
Es importante remarcar que Elisa Carrillo es Elisa Carillo Cabrera es la única mujer mexicana y la primera bailarina latinoamericana en ganar los tres premios internacionales de danza más importantes: el Prix Benois de Danse, el Soul of Dance de Rusia (una de las pocas bailarinas no rusas en recibir este galardón) y el Festival Dance Open de San Petersburgo. Actualmente es la primera bailarina del Staatsballett de Berlín, una de las diez compañías de danza más reconocidas del mundo.
Es también embajadora de la cultura mexicana, miembro del comité internacional de danza de la UNESCO, miembro del comité de Diplomacia Cultural de México, presidenta del comité de la Fundación Elisa Carilos Cabrera AC, directora artística de la Fundación Sir Anton Dolin, codirectora de la Compañía Nacional de Danza en México, Maestría en Ballet otorgada por el Ministerio de Cultura de Alemania y por la John Cranko Schule Stuttgart.
