“Yo trabajé ahí aproximadamente hace 17 años (…) veo que el señor no cambió”: esto fue lo que externó una de las mujeres que hoy se une a las voces de denuncia contra Talavera Armando, un sitio de venta ubicado en el Parían, a unos metros del Barrio del Artista, en la ciudad de Puebla.
Una denuncia por violación a los derechos al trabajador ha sido el parteaguas para que diversas personas se sumen a los señalamientos contra este negocio; después de que, a través de la plataforma de TikTok, un usuario exhibiera el abuso reflejo en largas jornadas y retrasos de pagos, emergieron testimonios de acoso.
Algunos de las denuncias ya han sido recopiladas en la misma plataforma, exhibiendo comportamientos poco éticos, situaciones de acoso sexual y discriminación a compañeros de trabajo: “era relativamente una niña todavía”, “me dio la mano y me dijo que debiamos conocerso mejor”, “preguntaba si vivía sola o si tomaba cerveza”, son algunos de los relatos
Entre estas se encuentra también la historia de la usuaria la usuaria Miss Ruth, quien relató una terrible experiencia de acoso ocurrida en su período laboral, cuando ella tenía tan solo 16 años de edad. Aunque en este lapso de trabajo la joven fue elogiada por su desempeño, en contraste sus compañeros recibían malos tratos.
“Yo era joven, ingenua y era bastante inexperta; deje pasar por alto todas estas banderas rojas”
La salida de Ruth, sin embargo, se da tras un tocamientos indebidos del dueño, conocido por diversos testimonios como “el jefe”. La narración describe que ella intentó huir en el momento de lo ocurrido, sin embargo, al estar en un espacio público, el hombre fingió que se trataba de su padre para desviar la atención de la agresión y acoso.
Similar al caso de Ruth, la usuaria “Cinnamungrl”, externó comportamientos extraños por parte de “el señor”, además de comentarios fuera de lugar. Todas las denuncias, muestran una forma de operar similar, en la que jóvenes menores de edad son contratadas, engañadas, acosadas y amenazadas en caso de que busquen hablar.
“Hablamos sobre estas experiencias para crear conciencia y tal vez, ojalá, evitar que le suceda a otra mujer o persona”.
Hasta el momento las denuncias continúan viralizándose en redes, aunque aún no se ha abierto un procedimiento legal contra el dueño de esta fábrica de talavera.
