El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva condecoró al expresidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica con la Orden Nacional de la Cruz del Sur, considerada como la más alta distinción que el líder de Brasil otorga a ciudadanos extranjeros distinguidos. Esto previo a las reuniones del Mercado Común del Sur (Mercosur).
“No se elige a un hermano. Ni siquiera se elige a la madre. Pero uno elige a un compañero”, manifestó el presidente sudamericano.
El mandatario destacó que la medalla que le entregó a Mujica no es por haber sido presidente de Uruguay, sino por ser “la persona más extraordinaria”. Ya que es uno de los presidentes con los que ha entablado una amistad.
«Esta es la distinción más importante de Brasil. La medalla que le estoy entregando a Pepe Mujica no es por haber sido presidente de Uruguay. Puedo decir que, de todos los presidentes que he conocido y con los que he entablado una amistad, Pepe es la persona más extraordinaria».
Cabe mencionar que Da Silva estuvo acompañado de su homónimo colombiano Gustavo Petro en el encuentro que se llevó a cabo en el jardín de la casa del exmandatario en Montevideo. Por su parte, Pepe Mujica estuvo al lado de su esposa Lucia y en plena recuperación del cáncer de esófago. Durante la ceremonia, portó una banda azul que tiene una cruz que tiene el rostro de Simón Bolívar, símbolo de la libertad sudamericana.
Al igual que Lula, Gustavo Petro, presidente de Colombia, ha manifestado su admiración por el exlíder uruguayo, que es un emblema de la izquierda latinoamericana, sobre todo porque los dos formaron parte de un movimiento guerrillero en sus respectivos países, el M-19 y el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros (MLN-T).
“Ambos terminamos dejando armas porque entendimos que la paz era lo más importante y lo más revolucionario de una sociedad”, sentenció.
Finalmente, el exmandatario que gobernó Uruguay, de 2010 a 2015, agradeció a su amigo Lula da Silva dicha distinción, aunque mencionó que no es un hombre de medallas, sino un hombre de pueblo, pero da gracias por haberse encontrado en el mismo camino.