Tras más de un mes sin ser localizada, la familia de la abogada ayuuk Sandra Domínguez instaló un plantón frente al Palacio de gobierno de Oaxaca. El mismo día la comunidad Triqui protestaba por los probables feminicidios de Adriana y Virginia. Mientras que un día antes la familia de Judith Vianney, enfermera que fue localizada sin vida, se despedía de ella.
Este 6 de noviembre, a más de un mes de la desaparición de la abogada ayuuk Sandra Domínguez, su familia instaló un plantón frente al palacio de gobernación de Oaxaca. Exigiendo su localización inmediata y denunciando la ineficacia en las acciones de búsqueda. En la madrugada del mismo día, se dieron a conocer los probables feminicidios de Adriana y Virginia, pertenecientes a la comunidad originaria Triqui. Unos días antes, el 2 de noviembre, fue localizada sin vida la enfermera Judith Vianney, quien había sido reportada como desaparecida once días atrás. Oaxaca clama justicia por las tres mujeres que en una semana fueron víctimas de feminicidio, por la localización de Sandra Domínguez y por todas las mujeres que han sido víctimas de estos delitos.
En las fotografías de medios locales es posible ver a la familia de Sandra con playeras moradas, sentadas en sillas de fierro frente a la puerta cerrada del Palacio de Gobierno de Oaxaca. Su mamá y su hermana sostienen una imagen de la abogada exigiendo su presentación con vida. Han pasado 34 días y no ha sido localizada. Dijeron frente a los medios que habían confiado en el gobernador Salomón Jara, quien prometió que encontrarían con vida a Sandra, el tiempo había pasado y esto no había sucedido. Por eso ahora, están ahí, exigiendo que sea localizada.
Los carteles que las acompañan no sólo claman por Sandra sino también por las mujeres que han sido víctimas de feminicidio. El 6 de noviembre, mientras ellas exigían justicia por Sandra, con trajes rojos delineados por listones, la comunidad Triqui comenzó un bloqueo indefinido en la entradas y salidas a Putla de Guerrero y Santiago Juxtlahuca exigiendo la investigación inmediata y exahustiva de los probables feminicidios de sus compañeras Adriana y Virginia, ambas militantes del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui.
Pero el duelo en Oaxaca ya había comenzado desde días anteriores cuando fue localizada sin vida la enfermera Judith Vianney. Tras una protesta exigiendo justicia, el pasado 5 de noviembre, la joven fue despedida con porras, aplausos y la exigencia de que no haya impunidad. Ya hay una persona detenida por este delito, sin embargo de acuerdo con información de La Jornada, su familia señaló irregularidades por parte de la Fiscalía del estado.