La organización Fundar recordó que este 20 de julio se cumplen 10 años de la muerte de Marisol en Chiapas, quien fue víctima de negligencia médica y violencia obstétrica. Enfatizaron que la exigencia de justicia para Marisol es también un llamado a que se garantice la salud materna en todo el país.
La organización Fundar hizo público en redes sociales que a diez años de la muerte de Marisol en Chiapas la búsqueda por justicia y medidas de reparación no se ha detenido. Enfatizaron que a una década de la muerte de Marisol autoridades del IMSS se disculparán publicamente con la familia de la joven. De igual forma, enfatizaron que la exigencia de justicia por Marisol es también un llamado para que se garantice la salud materna y una vida libre de violencia obstétrica.
«El caso de Marisol muestra un patrón sistemático de fallas estructurales en el sistema de salud que llevaron a una muerte materna que se pudo haber evitado», publicó la organización Fundar en su cuenta de X.
La organización Fundar recordó lo sucedido a Marisol. Ella tenía una cesárea programada para el 24 de julio del 2015 sin embargo el 19 se sintió mal. Cuando su esposo la llevó al hospital, lamentablemente, el bebé había muerto por un probable desprendimiento prematuro de placenta. La organización señaló que se trataba de una grave urgencia obstétrica que requería una cesárea sin embargo la cirugía la realizaron médicos residentes que no tenían ni la experiencia ni la supervisión adecuada, agregaron que el hospital no tenía plasma ni equipo para atenderla.
Marisol debía ser trasladada a un hospital con mayor infraestructura, el más cercano era el de Tuxtla y estaba a hora y media, sin embargo el traslado de la joven se retrasó seis horas porque no había un médico de cuidados intensivos que pudiera recibirla. Marisol falleció en la madrugada del 20 de julio. La organización señaló que hubo otras irregularidades en la atención hospitalaria hacia Marisol, además de las antes mencionadas, por ejemplo: no fue posible hacer un estudio histopatológico para determinar las causas de emergencia, días antes a Marisol le pidieron ultrasonidos que no pudo realizarse porque el hospital no tenía el equipo necesario y en la clínica privada a donde la redirigieron era demasiado caro. Además enfatizaron que cuando Marisol falleció le negaron familia el expediente clínico por lo que Fundar interpuso un juicio de amparo para poder obtenerlo.
Después de llevar el caso ante la Comisión de Derechos Humanos, en 2018 la dependencia reconoció que el hospital no protegió el derecho a la salud ni el derecho a la vida de Marisol, así como que las omisiones son parte de una problemática estructural. Entre las medidas de reparación integral del daño está mejorar la infraestructura hospitalaria y garantías de no repetición. Como parte de estas medidas, el IMSS se disculpará públicamente con la familia de Marisol una década después.