Como parte del ciclo de asambleas comunitarias de la organización Cholultecas Unidos en Resistencia, la del pasado 4 de mayo se llevó acabo en San Bernardino Tlaxcalancingo. Los pueblos manifestaron su oposición a la construcción de un penal cerca del relleno sanitario de Cholula.
Este fin de semana se llevaron a cabo asambleas comunitarias de la organización Cholultecas Unidos en Resistencia con presencia de académicos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) y la Universidad Iberoamericana Puebla (IBERO), esto como parte de ciclo de Asambleas Generales Comunitarias que comenzó el 29 de abril y concluirá el 8 de mayo del presente año.

Estas asambleas se llevan a cabo por los acuerdos establecidos desde octubre de 2023 entre representantes de pueblos originarios, la secretaría de Gobernación estatal y el ayuntamiento de San Andrés Cholula. Dichos acuerdos establecían que las estrtaegias de planeación territorial serían analizadas por la BUAP, la Ibero Y la UDLAP. En estas asambleas que se comparte con la comunidad los dictámenes de estas instituciones.
A pesar de que las tres universidades coincidieron en que el documento de las comunidades es técnicamente viable y jurídicamente procedente, la propuesta no ha sido integrada al Programa Municipal de Desarrollo Urbano (PMDU). Su dictamen señala que la propuesta de las comunidades incluye criterios técnicos de sustentabilidad, protección de zonas agrícolas, enfoque que reconoce la autodeterminación de los pueblos indígenas y zonificación por vocación del suelo.
Los pueblos señalaron estar en desacuerdo con la construcción de un penal a unos cuantos metros del relleno sanitario de Cholula pues no se ha consultado a las comunidades cercanas acerca de este proyecto ni se ha precisado de dónde va a salir el agua que será ocupada para más de quinientos internos.
Esto se suma a la lucha que continúa contra el basurero de Cholula, que si bien fue clausurado en agosto de 2024, en febrero de este año el gobernador Alejandro Armenta anunció que será convertido en un Centro de Transformación de Desechos Orgánicos e Indorgánicos. Ante esto, los pueblos continúan firmes en que no aceptarán ni un kilo más de basura en su territorio.
