mayo 1, 2025 10:46 pm
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Revelan red de tráfico de riñones traídos de Kenia para pacientes alemanes

Una investigación internacional reveló una red de tráfico de órganos, (específicamente de riñones) que opera entre Kenia y Alemania, aprovechándose de la pobreza de los jóvenes africanos y la desesperación de pacientes europeos que necesitan trasplantes. El reportaje realizado por los medios alemanes Der Spiegel, ZDF y DW, expone como intermediarios sin escrúpulos engañan tanto a donadores y receptores, violando las leyes éticas y médicas.

La historia de Amón: promesas rotas y salud arruinada.

 En su trabajo periodístico recogen el testimonio de Amón Kipruto Mely, un joven de origen keniano quien, fue convencido por un amigo de vender su riñón por 6mil dólares (aproximadamente 105 mil pesos mexicanos), suma con la podría mejorar su situación económica. Sin embargo, tras ser llevado al Hospital Medheal ubicado en la cuidad de Eldoret, Kenia, médicos le hicieron firmar papeles en inglés -idioma-que no domina-, solo recibió 4mil dólares. A su vez que su salud empeoro tras el trasplante ya que sufre mareos, debilidad y desmayos. Esto hizo que su madre denunciara que estaban lucrando con la pobreza de su hijo.

Crimen organizado y victimas multiplicadas

Willis Okumu, investigador del Instituto de Estudios sobre Seguridad de Nairobi, confirmó que este caso no es aislado. En la cuidad de Oyugis al menos 100 jovenes habrían vendido sus riñones, muchos ahora con secuelas físicas psicológicas.

“No creo que lleguen a los 60 años”, afirmó Okumu, quien calificó estas practicas como “crimen organizado transnacional “

 Por otro lado, en Alemania, pacientes, en su mayoría personas de la tercera edad, son manipulados por agencias que les prometen órganos legales obtenidos del extranjero sin revelar el ilícito que hay detrás.

Responsables y vacíos legales

Aunque  el hospital Medheal niega su participación en el tráfico de órganos, hay documentos  y testimonios  que demuestran su complicidad, la falta de regulación en países como Kenia facilita esta operaciones ilegales. Mientras en Alemania investigan a clínicas e intermediarias presuntamente relacionados al caso.

Un llamado a la acción

Organizaciones como la INTEPOL y ENACT exigen mayor cooperación internacional para frenar estas redes.

“Es urgente proteger a las victimas y perseguir a los traficantes”, declaró un portavoz de DW

Este caso evidencia la crueldad de un negocio que comercializa la vida humana, mientras la pobreza y la enfermedad sigan siendo vistas como mercancías, miles de personas estarán en riesgo.

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