(Vía ONU Noticias) El Secretario General y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos han condenado los ataques llevados por Israel en la Franja de Gaza y que, según el Ministerio de Salud de Gaza, han causado la muerte a más de 400 palestinos y han dejado heridos a otros varios cientos.
En un comunicado y una comparecencia ante la prensa, António Guterres expresó su conmoción por los bombardeos e hizo un enérgico llamamiento para que se respete el alto el fuego, se restablezca sin trabas la ayuda humanitaria y se libere sin condiciones a los rehenes restantes.
En tanto, Volker Türk manifestó horror ante los últimos ataques israelíes en Gaza, y afirmó que esta nueva embestida “añadirá tragedia a la tragedia”.
Volker Türk, recordó que los últimos 18 meses de violencia han demostrado que no hay una solución militar a la crisis e instó a Israel a detener sus operaciones militares, insistiendo en que el uso continuo de la fuerza solo agravará el sufrimiento de los palestinos, que ya enfrentan condiciones catastróficas.
Türk exigió la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes y personas detenidas arbitrariamente, enfatizando que la guerra debe terminar definitivamente. Apeló también a todas las partes con influencia a impulsar la paz y evitar un mayor sufrimiento civil.
«Esta pesadilla debe terminar de inmediato», puntualizó.
El comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) alzó la voz para referirse a las “terribles escenas de civiles muertos, entre ellos niños, tras oleadas de intensos bombardeos de las fuerzas israelíes durante la noche”.
En una publicación en X, Philippe Lazzarini, sostuvo que reavivar “el infierno en la tierra” con la reanudación de la guerra sólo acarreará más desesperación y sufrimiento.
“Es imprescindible restablecer el alto el fuego”, recalcó.
Al concluir el plazo del alto el fuego acordado entre Israel y Hamas, Israel cerró nuevamente la entrada a la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, que desde hace dos semanas no recibe suministros vitales, provocando nuevamente hambre y mayor desesperación.

En el Consejo de Seguridad, el coordinador de la ONU para Ayuda de Emergencia informó sobre la situación en Gaza, planteando tres peticiones urgentes: que se permita la entrada sin trabas de bienes humanitarios y comerciales a la Franja, que se vuelva al alto el fuego, y que se financie la respuesta humanitaria, que actualmente cuenta apenas con un 4% de los recursos que se precisan.
“Anoche se hicieron realidad nuestros peores temores”, comenzó diciendo Tom Fletcher, reportando que, además de perpetrar la matanza, las fuerzas israelíes emitieron nuevas órdenes de evacuación.
“Una vez más, la población de Gaza vive sumida en un profundo temor. Los modestos avances logrados durante el alto el fuego están siendo destruidos”, abundó.
El titular de la Oficina de Asuntos Humanitarios (OCHA) destacó el grave impacto del bloqueo a la asistencia básica, reportando que se ha cortado el suministro eléctrico a la planta desalinizadora del sur de Gaza, lo que limita el acceso al agua potable a 600.000 personas.
En Gaza, los precios de los productos básicos se han disparado y seis panaderías subvencionadas por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han cerrado debido a la escasez de gas para cocinar.
Fletcher advirtió de una creciente catástrofe humanitaria para los 2,1 millones de gazatíes, en vista del cierre total a la ayuda a Gaza desde el 2 de marzo.
“Nuestras reiteradas solicitudes para recoger ayuda en el cruce de Karem Shalom han sido rechazadas sistemáticamente”, indicó, y añadió que no se han liberado más rehenes y que las evacuaciones médicas y las rotaciones del personal humanitario también se han detenido.
“Se están racionando los recursos esenciales de supervivencia”, dijo, y apuntó que la población de Gaza depende de la asistencia humanitaria. “El bloqueo tendrá un impacto desastroso”, reiteró.
Fletcher recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de los altos riesgos de salud pública, incluyendo las enfermedades transmisibles causadas por el hacinamiento y las malas condiciones sanitarias.
El personal humanitario permanece sobre el terreno, listo para brindar apoyo vital a los sobrevivientes y llevar a cabo nuestra misión humanitaria, pero necesitamos permiso para hacerlo, indicó.
“Bloquear la comida, el agua y los medicamentos es inadmisible y viola el derecho internacional humanitario”, enfatizó, y citó el mensaje que un médico palestino que dejó en la pizarra de un hospital en Gaza, antes de ser asesinado: “Quien se quede hasta el final contará la historia. Hicimos lo que pudimos. Recuérdennos”.
NOS VUELVEN A ASALTAR LAS MISMAS IMÁGENES: PALESTINA URGE ACCIONES DEL CONSEJO DE SEGURIDAD DE LA ONU
Nos vuelven a asaltar las mismas imágenes”, empezó diciendo el embajador palestino ante la ONU. “Anoche rememoramos el bombardeo criminal que nuestro pueblo sufrió durante más de 15 meses”.
Riyad Mansour destacó la gravedad de esta nueva arremetida sumada al bloqueo de la ayuda en la ya precaria situación humanitaria en Gaza,
«El fuego y el miedo se extienden una vez más por toda la Franja de Gaza», sentenció.
Palestina repudia estos crímenes, enfatizó.
Mansour pidió entonces al Consejo que cumpla con sus responsabilidades.
“Ustedes son el Consejo de Seguridad. Actúen. Tienen el poder de actuar, actúen ahora de acuerdo con el poder que les da la Carta de la ONU o se volverán irrelevantes”, espetó a los embajadores de los países integrantes del máximo órgano de seguridad.
“Actúen ahora para evitar el hambre del pueblo palestino”, insistió.
Mansour afirmó que los palestinos y los países árabes están actuando con responsabilidad y determinación “para poner fin a este conflicto de una vez por todas”.
“No escatimaremos esfuerzos y necesitamos toda la ayuda posible. Ayúdennos”, reiteró a los embajadores.
En cuanto a Cisjordania, Fletcher urgió a la comunidad internacional a prestar atención al empeoramiento de la situación humanitaria, e informó que 95 palestinos -17 niños entre ellos-, han muerto en lo que va de este año, mientras que 869 han sido heridos como consecuencia de las operaciones militares israelíes y de la violencia de los colonos.
El ejército israelí ha reanudado operaciones a gran escala en el norte de Cisjordania, desplegando tanques por primera vez en dos décadas, desplazando a 40.000 palestinos y destruyendo infraestructura civil, detalló.
Fletcher precisó que los palestinos de la Zona C enfrentan la expansión de los asentamientos israelíes, la violencia de los colonos y las demoliciones de sus viviendas, con los colonos atacando e incendiando casas palestinas.
Además, los bloqueos de carreteras y el cierre de puestos de control continúan interrumpiendo el acceso de los palestinos a servicios esenciales.
Esta no es una exposición informativa rutinaria», declaró el embajador de Argelia ante la ONU, Amar Bendjama, quien tachó de “crimen de guerra, indudablemente” el cierre a la entrada de ayuda a la Franja de Gaza.
«Es un esfuerzo calculado para quebrar la resiliencia del pueblo palestino durante el mes sagrado del Ramadán, sostuvo.
“El mundo atestigua otro capítulo del castigo colectivo que se inflige al pueblo de Gaza”, mientras la pertinencia del Consejo de Seguridad se cuestiona seriamente por su silencio “ante estas atrocidades”, añadió.
En este sentido, el diplomático hizo una pregunta: “¿Se atreverá [el Consejo] alguna vez a asumir su responsabilidad? ¿Actuará alguna vez para detener este genocidio y preservar lo que queda, si es que queda algo, de su credibilidad?”.
“Estamos presenciando la degradación sistemática de la dignidad humana, la supresión deliberada del derecho a la vida, la desaparición de los valores y principios que deberían ser la base del orden internacional”, denunció el embajador Bendjama.
Israel mantiene su compromiso de regresar a casa a todos los rehenes y de acabar con Hamas, dijo el embajador alterno israelí.
Brett Jonathan Miller advirtió que esa es una promesa que la comunidad internacional debe tomar en serio.
Como Estados Unidos, Israel acusó a Hamas de repeler las propuestas de los países mediadores.
“Por eso es una necesidad reanudar la lucha”, argumentó, y añadió que las fuerzas de su país están atacando objetivos de Hamás.
Miller indicó que Hamás tiene todavía 59 rehenes y aseguró que esa “es la crisis humanitaria más urgente”.
“Quienes están de verdad preocupados por las crisis humanitarias deben saber que hay una que es primordial: los rehenes que siguen bajo el cautiverio de Hamás”, declaró.
Tras resaltar el sufrimiento de esas personas “que han sido privadas del sol por meses y han sido sometidas a horrores inimaginables”, insistió en que las discusiones sobre un alto el fuego no son serias si no incluyen la liberación de los rehenes.